Poco a poco te has convertido en mi todo, me haces feliz cada ves que me hablas, me has salvado muchas veces sin que tengas la menor idea, me has hecho sentir cosas inimaginables, te has adherido a mí vida, para bien y no para mal. Me has ayudado, me has dado paz y alegría, amor y ternura, sueños y anhelos.
¿Qué haría hoy en día sin ti? Me has enamorado, eres increíble, tus sentimientos hacía mí, tus palabras, tú voz, tú amor me ha hecho muy bien, ya que nunca me imagine estar en está situación.
Eres el chico ideal de cualquiera. ¿Sabes? Nunca tuve prototipo alguno de un hombre, nunca antes ame a alguien, bueno, tal vez sí, tal vez no, pero debo agradecerte muchísimo el que aparecieras en el momento adecuado, mí vida antes de ti era realmente inservible, no tenía razón alguna por la cuál seguir adelante y llegaste tú y le diste sentido a ella, me haces feliz, me haces volar, me haces soñar.
¿Qué me has hecho? ¿En que me has convertido? Todo el día pienso en tí, todas las noches me haces anhelarte, me haces soñarte, y cuando no hablo contigo, me haces extrañarte, aunque sólo sean palabras, de mí parte es más que eso, es amor el que te entrego, no físicamente, sino virtualmente, por el momento. Ahora mí vida depende de ti, ¿Que haría yo sin ti?
Hoy en día mí vida a cobrado mucho sentido, te lo agradezco, me has hecho querer vivirla, vivirla sólo contigo. Tienes el poder de destrozarme o amarme, me tienes en tú poder, de nada serviría pedirte de favor que no me hagas daño, que no me lastimes, sí tiene que pasar sólo me quedara asumir el dolor y permanecer con mí rostro al frente, te amo, y espero que no suceda esto, aunque todo lo que comienza, tiene su final.
-Helena.
PD: Quiero tenerte entre mis brazos, pronto.
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